lunes, 13 de agosto de 2007

Helicópteros recaudadores


Hace unos dias salió la noticia de que la DGT está ultimando un nuevo sistema de radares instalados en helicópteros (http://www.lavanguardia.es/lv24h/20070809/53383606076.html ).

Hasta ahora, los helicópteros de que disponía la dirección general de tráfico, se usaban para vigilar las carreteras desde el aire en busca de maniobras temerarias, y multaban por ello. Por tanto podemos concluir claramente que la novedad únicamente sirve para que desde dichos helicópteros se pueda multar por exceso de velocidad.

Pero vayamos un momento a otra parte de nuestro propio continente.

En Alemania, en el año 1997, con 55 millones de habitantes fallecían unas 24000 personas al año en accidentes de carretera. En el año 2004, con 80 millones de habitantes, esa cifra no sólo no había aumentado, sino que se redujo sensiblemente hasta 6000 muertes, una cuarta parte.

¿Qué pasó en Alemania para que se diese una reducción tan drástica de las muertes en carretera?, pues es evidente que también tendrán que ver otros factores, pero sin duda el más importante fue la puesta en marcha de un novedoso sistema de asistencia a los heridos en carretera.

Alemania recurrió a implantar una gran red de helicópteros con equipos aeromédicos. Los aeromédicos realizaron 200 misiones al mes en el año 97, y en la actualidad efectuan más de 2000 anuales de media en las 52 bases de helicópteros repartidas por el territorio alemán.

Gracias a este sistema en Alemania han conseguido reducir considerablemente, tanto las muertes, como los casos de discapacidades o parálisis causadas por accidentes de carretera.

Visto ésto, hasta ahora los principales motivos para no seguir el ejemplo Alemán y no hacer un esfuerzo en crear poco a poco una red de asistencia sanitaria aérea que contribuyese a reducir las muertes en nuestras carreteras, podían ser fundamentalmente económicos, ya que es evidente que montar algo así no es precisamente barato y por tanto la falta de presupuesto podía ser el principal inconveniente.

Sin embargo hace unos días nos encontramos con la noticia con la que abríamos este artículo. Con el hecho de que la DGT va a utilizar esos helicópteros, pero no para mejorar la asistencia sanitaria, sino para poder medir nuestra velocidad desde el aire y que pasemos por caja.

¿En qué quedamos? ¿queremos reducir las muertes? ó simplemente ¿queremos poder cobrar a todo aquel que pise un poco más de la cuenta el acelerador?

Cada cual que saque sus propias conclusiones.

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